La geografía de Ercleón es de la siguiente manera. Se trata de un territorio sobre todo llano con pocos sistemas montañosos. En él abundan las praderas, los bosques y los ríos. El clima está dividido en dos estaciones en vez de cuatro. En la primera de estas divisiones, el tiempo es más cálido y está desprovisto de lluvias y tormentas. Es en la segunda en la que la tierra es castigada por el frío y la nieve.
El año se divide en doce meses de treinta días que tienen nombres dioses termecorios; Foga, Nara, Naó, Úbido, Meldus, Medas, Arás, Sofos, Teo, Néa, Ámagal y Cárasa.
Al norte de Ercleón colinda con el helado mar de Soto y con la dura, gris y gélida estepa de Meledia. En el Este se levantan las cordilleras Úrcatas y Mírtorur. Donde se encuentran algunas de las cumbres más altas y viejas como Máumur, Virar, Édrun o Gálabor, esta última es la más alta de todo Ercleón. Es en estas montañas donde viven la mayoría de los enanos. Debajo de estas cordilleras está la planicie de Ércela, una meseta desolada y donde apenas hay barreras de protección. Es habitada por manadas orcas, dinosaurios, trolls, brujos corruptos y otros tantos peligrosos. Más allá se encuentra el paso de Ércafo, un camino que une occidente y oriente. Dirección sur encontramos la cordillera de Corágar, la más larga de todo Ercleón. El suroeste queda cerrado por la bahía deTaungia, que separa Ercleón de Heledia. Más allá del Oeste, está el voraz mar de Árastor, una enorme fosa de aguas turbulentas que pocos pueden navegar con éxito.
Se sabe que al otro lado de este implacable mar hay otra tierra inexplorada. La llaman el continente de Taér Micar. Existen unos pequeños enclaves imperiales que vigilan esas costas, sin embargo, el propio mar de Árastor impide un mayor que se realice un mayor avance por esa región. También se rumorea que el mar ha impedido que lo que se esconde en Taér Micar llegue a Ercleón.
Para resumir lo que te explicado, querido viajero, podemos leer este poemilla del poeta Alfo:
Cuatro dominios hay en el continente.
El alto y frío norte,
El bajo y árido sur,
El lejano y duro este,
Pero es en Ercleón,
donde los árboles son altos como montañas,
los ríos grandes como mares
Y donde la bestia parlante habita.
Se alzaron reinos,
cien guerras se libraron.
Hasta que cayeron los imperios.
La hechicería aún se practica
El Cenebro vive todavía
Y la bestia parlante siempre lo habita…
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